La felicidad se puede definir como un estado de plenitud, en el cual existen emociones y sentimientos positivos. Los niños pueden sentirse plenos por cosas muy simples.
A continuación te brindaremos algunos consejos para que tu hijo aumente su felicidad:
- Establecer una rutina para que mi niño duerma bien
Debes guiarlo para que pueda dormir bien, establecer un horario fijo donde pueda cumplir con sus horas de sueño y así volverlo una costumbre. Esto permitirá que su humor mejore cada mañana, ya que habrá descansado y se habrá levantado con energía.
- 3 comidas al día
Es muy importante que no se salte comidas. Este hábito es muy simple pero el llevarlo a cabo puede hacerlo muy feliz, ya que cada comida ayuda a restablecer energía para mantenerse activo y sentirse satisfecho lo impulsa a intentar aprender más cosas, además de tener beneficios para su crecimiento
- Impúlsalo a que empiece a tomar decisiones
Por muy sencillas que sean, que tu niño tome decisiones le ayudará a saber que respetas su opinión y es igual de importante que la tuya. Cosas simples como “¿Qué te gustaría llevar hoy de lunch?” o ¿Qué zapatos quieres usar hoy?” Esto fortalece su autoestima y la seguridad en si mismo.
- Permitirle expresar sus emociones
Siempre ayuda a tu niño a entender el porque de sus emociones. Por ejemplo si está llorando, ayúdalo a entender que lo hace sentir así, cual es el sentimiento detrás de ello y oriéntalo a descubrir una solución positiva.
- Haz que se sientan amados
